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Fundación en Cartagena

El Monasterio del Magníficat fue fundado el 31 de mayo de 1986 por 10 religiosas procedentes del monasterio “Avemaría” de garzón (Huila), después de varias entrevistas telefónicas, la abadesa sor María Refugio del Divino Corazón, visitó Cartagena para entrevistarse con Monseñor Ruiseco personalmente y decidir el sitio donde ubicar la comunidad.

 

La arquidiócesis de Cartagena cedió la casa Olga en el barrio Torices, las fundadoras fueron muy bien recibidas por el señor Arzobispo Carlos José Ruiseco.

Recibimos una calurosa bienvenida por parte de los sacerdotes, religiosas de vida activa y muchos feligreses, quienes manifestaron gran gozo de tener una comunidad religiosa de vida contemplativa en la ciudad. Emprendimos una gran aventura dejando nuestro monasterio el en cual habíamos sido tan felices para extender la obra de nuestro buen Dios.

Las fundadoras visitaron los sitios históricos mas importantes de la cuidad, después de este recorrido fueron conducidas a la casa Olga, que ya habían adaptado con la debida clausura, dotada con lo mas necesario como son utensilios de cocina, aseo, etc. el cual fue habilitado por siete año.

En la mañana del 7 de julio de 1986 en la fiesta de los santos Ana y Joaquín, se celebra la primera eucaristía con la que monseñor Carlos José Ruiseco inauguró el oratorio.

La visita del Santo Padre Juan Pablo II, Cartagena fue un motor para el monasterio naciente, pues por este motivo se agilizaron todos los tramites manifestando monseñor Ruiseco en varias ocasiones su deseo de tener ubicadas las Clarisas cuando el sumo pontífice llegara a la ciudad y así fue como las hermanas externas nos representaron en su encuentro con las comunidades religiosas en sitio privilegiado donde pudieron inclusive intercambiar impresiones con él y besar su anillo.

Con grandes sacrificios conseguimos los terrenos donde estamos actualmente con la ayuda de Dios, María Santísima, San José y San Cayetano que son los ecónomos, el trabajo de las monjitas y la ayudas de los benefactores Gracias a Dios Ya tenemos buena parte del monasterio construido.

hermanas clarisas cartagena

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Si te encuentras visitando nuestra página web, es porque seguramente alguna vez te has hecho esta pregunta; ¿Quiénes son ellas?... pues bien estoy complacida de poder responderte ya que entorno a nuestra vocación surgen un sin número de interrogantes como: ¿Qué hacen las monjas escondidas en su "claustro" y "soledad"? ...¿Por qué se "encierran"? ...Monasterios ¿Para qué sirven? Como ves, nuestra "utilidad" se pone en tela de juicio.

 

Hay que tener presente algo y es que la vocación es el llamado que Dios te hace a que le sigas desde un estado de vida especifico, puede ser en el Matrimonio, la Soltería y la vida consagrada (Religiosos y sacerdotes) teniendo como único fin alcanzar la santidad. La vocación es algo difícil de comprender pues en si misma es un misterio, quien Te llama no es de este mundo; es Alguien sobrenatural.

Cristo te llama y en ese momento es cuando comienza el enamoramiento, la inquietud de tu alma, el anhelo de estar con Él a cada instante de tu vida, el deseo de donarte por completo, sentimientos que se convierten en una realidad palpable cuando dejas que aquel que te llama te abrace con su Amor misericordioso que solo Él sabe brindar, un amor inagotable y eterno; que a pesar de tus defectos no te rechaza, mas con ese amor te perfecciona.

Y la respuesta a ese amor inmerecido se da a través de la perseverancia y la fidelidad que hacen florecer la soledad y el silencio.

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